Seguridad estudiantil y salud mental

Nuestros estudiantes se enfrentan a nuevas dificultades nunca antes vistas, cómo el aumento de acceso a información, miedo sobre la seguridad escolar, y el estrés sobre el hogar y la vida académica. Como sistema escolar, es nuestra responsabilidad cuidar de la salud mental de los estudiantes y asegurarnos de que se sientan seguros dentro de las paredes de nuestras escuelas. Pero tenemos que ir más allá de lo que hemos definido tradicionalmente como “seguro”. Nosotros estamos en una nueva era con problemas que requieren políticas audaces.

Aprendizaje socioemocional

La salud mental de nuestros estudiantes debe ser la prioridad máxima de nuestro distrito. La responsabilidad de nuestro sistema escolar es proteger al estudiante, y eso va más allá de sólo su seguridad física. Nuestros estudiantes están lidiando con las complejidades de crecer en el siglo XXI, rodeados por el internet y problemas como el acoso cibernético. Por lo tanto, tenemos que empezar a implementar el aprendizaje socioemocional dentro de nuestras escuelas. El aprendizaje socioemocional le permite a nuestros estudiantes a desarrollar habilidades necesarias para tener éxito en lo académico. Estas habilidades se enfocan en el desarrollo de la comprensión de sus metas, emociones, y experiencias. El poder del aprendizaje socioemocional se encuentra en su habilidad de no sólo proveer las herramientas para el éxito académico y lidiar con el estrés, pero también la habilidad de enfrentar los problemas que tienen los estudiantes en la sociedad moderna. Nuestro distrito debe expandir el uso del aprendizaje socioemocional para ofrecerle a los estudiantes la oportunidad de entender la importancia de su salud mental. El estrés académico, de actividades  extracurriculares, y de los problemas personales puede ser abrumante, si proporcionamos en el currículo el aprendizaje socioemocional a nuestros estudiantes podemos ayudarles lidiar con esto. A través de los recursos en línea y en clase, podemos redefinir la imagen de la educación tradicional, incorporando las habilidades emocionales y “suaves” que nuestros estudiantes necesitan para tener éxito. Implementando completamente el aprendizaje socioemocional  asegura que nuestras escuelas puedan ayudar a desarrollar a nuestros estudiantes, tanto de su conocimiento del plan de estudios como en su comprensión de su propio bienestar y salud.

Disminuir el radio de estudiante-consejero

En el Condado de Miami-Dade el radio de estudiantes a consejeros a partir del 2019 fue de 462 a 1. Mientras tanto, la Asociación Consejera Americana (American Counseling Association) recomienda un radio de estudiante a consejero de 250 a 1. Aunque el condado ha avanzado hacia la conciencia de la salud mental con el desarrollo del Departamento de Servicios para la Salud Mental (Department of Mental Health Services), no hemos llegado a los puntos necesarios para atender a nuestros estudiantes de forma adecuada. A pesar del aumento en la contratación, nuestras escuelas necesitan más consejeros para garantizar el cuidado y atención adecuado de nuestros estudiantes. Nuestros consejeros cumplen papeles inmensamentes importantes en el desarrollo de nuestros estudiantes, proveyendo información necesaria y guiando nuestros estudiantes en sus caminos hacia el éxito. Bajo el nivel actual de trabajo asignado a los consejeros, es extremadamente difícil proveer a cada estudiante la atención que merecen. Por lo tanto, debemos disminuir el radio actual de estudiantes a consejeros, hasta el punto de que nuestro condado por lo menos cumpla con las pautas establecidas por la Asociación Consejera Americana (American Counseling Association).

Cómo distrito, debemos liderar en la conciencia de salud mental, y eso incluye asegurar que contamos con el personal adecuado para proveer el apoyo adecuado a nuestros estudiantes. Otra área de preocupación es la falta de personal dedicados a la salud mental en las escuelas. Aunque el distrito haya contratado más profesionales para atender a nuestros estudiantes, el nivel y proporción actual no son suficientes. Nuestros estudiantes necesitan acceso a los recursos que les permite lidiar con sus circunstancias sociales y emocionales, y nuestro distrito no cumple con su responsabilidad cuando no se les provee dichos recursos. A nivel de distrito, debe haber un incremento en el número de profesionales de salud mental que están contratados, además, deben de ser claramente accesibles para los estudiantes para que estén conscientes de este recurso. Al aumentar el número de consejeros y profesionales de salud mental, y garantizar la atención adecuada para cada estudiante, podremos crear un sistema escolar que prioriza la salud mental y bienestar de nuestros estudiantes.

Redefiniendo la seguridad

Nuestra definición de la seguridad no puede basarse sólo en reaccionar a las situaciones mientras se desarrollan; más bien, deben de ser proactivo en prevenir el desarrollo de las situaciones peligrosas. El aumento de la presencia policial en las escuelas no garantiza que los estudiantes se sientan más seguros; de hecho, hay evidencia que sugiere que la tendencia actual de incrementar Oficiales de Recursos Escolares (School Resource Officers) es que crea un ambiente escolar menos inclusivo.  Mientras la dedicación de Oficiales de Recursos Escolares (School Resource Officers) a nuestras escuelas es importante y apreciado, como distrito, es nuestra responsabilidad balancear tanto lo físico como el bienestar psicológico de nuestros estudiantes. La “seguridad” no es simplemente castigar a los estudiantes por comportamiento inapropiado, es la falta de ese comportamiento desde el principio. Nuestra meta debería ser usar medidas preventivas, como el aprendizaje socioemocional y visitas con el consejero, para asegurar que no se desarrollen problemas en el que se necesite acciones policiales. Nuestras escuelas deben ser diseñadas para garantizar la seguridad del estudiante, y eso significa promover relaciones cercanas entre profesores y alumnos que permitan la identificación temprana de posibles problemas. Además, un aumento en la disponibilidad de los recursos de salud mental y consejeros permitirá que los estudiantes puedan abordar sus preocupaciones y recibir la ayuda que necesiten. Promoviendo un ambiente de inclusividad en nuestras escuelas, podemos evitar el comportamiento asociado con la exclusión social. Además, promoviendo un sentido de comunidad dentro de nuestras escuelas, podemos ayudar a que nuestros estudiantes se sientan seguros, sabiendo que están rodeados por personas que realmente se cuidan entre sí. En conjunto con el trabajo de los empleados y consejeros de nuestras escuelas, podemos infundir un sentimiento de confianza en nuestra comunidad que nuestras escuelas son espacios seguros para nuestros estudiantes. Al valorar la prevención sobre el castigo, promoveremos la seguridad verdadera en nuestras escuelas.

The owner of this website has made a commitment to accessibility and inclusion, please report any problems that you encounter using the contact form on this website. This site uses the WP ADA Compliance Check plugin to enhance accessibility.